Masaje y aparatología corporal ¿es posible?

Los masajes son una de las herramientas terapeúticas más antiguas que con el paso del tiempo se han ido modificando para brindar cada vez más beneficios. Sus efectos sobre la salud física y emocional los convierte en un tratamiento muy completo y efectivo. Actualmente, en el secto de la estética es habitual combinar el masaje manual con los equipos de aparatología. ¡Te cuento los beneficios de combinar masaje y aparatología corporal!

La práctica de masajes corporales ofrece grandes beneficios a nivel físico y emocional con grandes resultados en cabina. Debido al gran volumen de trabajo en cabina y a la búsqueda de técnicas combinadas para trabajar en profundidad, se han conseguido unir las técnicas de masaje con aparatología. De esta manera, ofrecemos lo que conocemos como masaje rotacional produndo, una técnica patentada en combinación con otras tecnologías. 

Qué es el masaje rotacional profundo

Es la técnica que emplean los equipos gracias a las esferas giratorias mecánicas que incorporan dichos equipos y que facilitan el trabajo a los técnicos. Además, conseguimos un masaje más uniforme y profundo que será recibido por todas nuestras clientas de igual forma independiente del operador que lo realice o del momento de la jornada. Por otro lado, también evitaremos lesiones en nuestras esteticistas. 

El masaje rotacional combina un conjunto de manipulaciones variadas basadas en el movimiento rotacional y la presión sobre la superficie del cuerpo generando una influencia mecánica. Sus objetivos pueden ser terapéuticos, preventivos o curativos.

Este masaje fue diseñado para relajar, estimular o rehabilitar las diferentes partes del cuerpo. Ayuda a mejorar la flexibilidad de los músculos, promueve una mejor circulación y a reducir el estrés. Está demostrado que los masajes consiguen beneficios en la piel, músculo, aparato digestivo, sistema nervioso y linfático; y estimula la producción y normalización de hormonas que influyen directamente en el estado anímico de la clienta. Esto se consigue gracias al aumento de la actividad vaga por medio de la presión del masaje consigue reducir las hormonas del estrés como el cortisol. 

Por ejemplo, cuando realizamos una estimulación del sistema linfático utilizamos maniobras muy lentas con muy poca presión. Por el contrario, si queremos trabajar una reducción de volúmenes, sobre todo en el tejido adiposo, trabajaremos con una presión más fuerte y a una velocidad media. Para cuando queramos realizar un trabajo de reafirmación mediante una activación del tejido utilizaremos una presión media y una velocidad de rotación rápida. 

De este modo, estas tecnologías combinan lo mejor de las técnicas manuales que tanto gustan a las clientas con la última tecnología ofreciendo grandes resultados en sus tratamientos corporales. Descubre todas estas posibilidades en el equipo Zionic en el próximo post.