Cosmética tradicional o cosmética correctiva.
Cuándo elegir cosmética tradicional o correctiva según el momento y la piel.
Uno de los trabajos más importantes en el centro de estética, y a veces de los menos valorados, es hacer un buen diagnóstico facial. Debemos tener muy claras las diferentes alteraciones que puede presentar la piel y qué causas las producen para poder ofrecer el mejor tratamiento a cada clienta. Sin un diagnóstico adecuado, el mejor tratamiento no tendrá los resultados esperados, incluso podría ser contraproducente.
Cuando tenemos diagnosticada la piel y sabemos lo que queremos tratar, es el momento de decidir el plan de tratamientos y cuidados que vamos a recomendar a nuestra clienta.
Podemos diferenciar entre tratamientos cosméticos y tratamientos correctivos.
Tratamientos cosméticos
Son los tratamientos que están más basados en la prevención que en la corrección.
Nos ayudarán a normalizar la piel y a devolverle brillo y luminosidad. Por lo tanto, en la mayoría de ocasiones deberemos empezar realizando tratamientos cosméticos.
Debemos elegir primero los productos más básicos, enfocados a la higiene, como son las leches desmaquillantes, los geles limpiadores o los tónicos faciales. Con ellos conseguiremos reducir la suciedad de la piel, adaptándonos al grado de arrastre que la piel necesite.
Continuaremos con tratamientos que consigan un manto hidrolipídico estable, por lo que hidrataremos las pieles deshidratadas y regularemos el exceso de grasa en los casos necesarios.
Dentro de los tratamientos cosméticos, también se encuentran los tratamientos antiedad que actúan a un nivel más superficial. Utilizaremos principios activos como la vitamina C, el colágeno, la espirulina o el retinol, que nos ayudarán a mejorar pequeñas imperfecciones y protegerán la piel de posibles agresiones que generen un envejecimiento prematuro.
Tratamientos correctivos
Son tratamientos que actúan a un nivel más profundo.
Nos permiten minimizar diferentes alteraciones como son las manchas, las marcas de acné o las arrugas profundas. Hablamos por lo tanto de peelings químicos. La descamación controlada y efectiva de las capas más superficiales del estrato córneo, conducen a resultados transformadores que muestran una piel totalmente renovada y saludable. Ofrecen resultados más visibles pero no se pueden realizar si la piel no se encuentra en unas condiciones óptimas.
Los tratamientos cosméticos y los correctivos no compiten entre ellos sino que ofrecen mejores resultados cuando trabajamos en simbiosis. Para poder realizar un tratamiento correctivo como puede ser un peeling ácido la piel debe haber sido preparada previamente, y para esto habremos realizado algún tratamiento cosmético. De la misma manera, el peeling químico mejorará los resultados de los tratamientos cosméticos que hagamos en las semanas posteriores, ya que ayudará a que los principios activos tengan una mayor penetrabilidad.
Por lo tanto, en nuestra carta de tratamientos, es importante ofrecer tratamientos cosméticos y tratamientos correctivos. Según la piel de la clienta y la época del año en que nos encontremos diseñaremos un plan de tratamiento personalizado.